El tema del regreso de Jesucristo es uno de los pilares fundamentales de la fe cristiana. Desde hace siglos, la Iglesia ha aguardado con esperanza el momento en que su Salvador regrese para cumplir su promesa de redimir y restaurar la creación. Este evento profetizado es considerado como el clímax de la historia humana y la culminación del plan divino para la humanidad. En este ensayo, exploraremos la perspectiva de la Iglesia sobre el regreso de Jesucristo y cómo esta creencia ha impactado y sigue impactando en la vida de los creyentes.
- La Esperanza en la Escritura
El fundamento de la creencia del regreso de Jesucristo radica en las Sagradas Escrituras. Tanto el Antiguo como el Nuevo Testamento contienen profecías y enseñanzas que hacen referencia a este evento trascendental. La Iglesia se aferra a las palabras de Jesús, quien afirmó que volvería a la Tierra como Rey y Juez (Mateo 24:30, 25:31). Los apóstoles también proclamaron la promesa de su retorno, exhortando a los creyentes a estar vigilantes y preparados para ese día (1 Tesalonicenses 5:2; 2 Pedro 3:10).
- Impacto en la Vida de los Creyentes
La creencia en el regreso de Jesucristo ha sido una fuente de consuelo y esperanza para la Iglesia a lo largo de la historia. Ante los desafíos y dificultades de la vida, los creyentes encuentran aliento en la promesa de que Jesús regresará para llevarlos a su presencia (Juan 14:3). Esta esperanza infunde valentía en momentos de persecución y tribulación, recordándoles que este mundo es solo temporal y que su recompensa eterna les aguarda en el cielo (2 Corintios 4:17).
Asimismo, la creencia en el regreso de Jesucristo impulsa a la Iglesia a llevar a cabo su misión en el mundo. La Gran Comisión, dada por Jesús antes de su ascensión, insta a los creyentes a difundir el evangelio a todas las naciones (Mateo 28:19-20). Esta tarea adquiere una urgencia particular al reconocer que el regreso de Cristo está próximo y que aún hay muchos que necesitan escuchar el mensaje de salvación.
- La Preparación para el Regreso
La Iglesia también se enfoca en la preparación para el regreso de Jesucristo. Esto implica una vida de fe activa y comprometida con los principios cristianos. La Palabra de Dios se convierte en una guía y fuente de sabiduría para los creyentes, ayudándoles a vivir vidas santas y justas (1 Pedro 1:15-16). La oración, la adoración y la comunión son prácticas esenciales que fortalecen la relación con Dios y aumentan la expectativa del regreso de Cristo.
Además, la Iglesia se esfuerza por mantener una actitud de vigilancia y esperanza. Aunque nadie conoce el día ni la hora del regreso de Jesús (Mateo 24:36), los creyentes son instados a estar atentos a los signos de los tiempos y a estar preparados en todo momento (Mateo 24:42-44).
Conclusión
El regreso de Jesucristo es una doctrina central para la Iglesia, que brinda esperanza, inspira misión y promueve una vida de fe auténtica. A lo largo de la historia, los cristianos han confiado en la promesa de que el Señor volverá para establecer su reino eterno. Mientras la Iglesia aguarda con anhelo este evento escatológico, también se compromete a ser luz en el mundo y a compartir el mensaje del evangelio con amor y compasión. Que esta esperanza perdure y motive a la Iglesia a vivir de manera digna del llamado al cual ha sido convocada hasta el día en que Jesucristo regrese triunfante para reunirse con su pueblo.
