La vida es un campo de entrenamiento para la eternidad. Dios usa cada circunstancia para moldearnos y prepararnos para su propósito eterno. Oswald Chambers, autor del libro “En pos de lo supremo”
Cuando leí esta frase, vino a mi mente una de mis historias favoritas, la de José el soñador (Génesis 37). Conocido por sus sueños proféticos y su manto de colores, fue traicionado y echado a una cisterna por sus propios hermanos; además fue vendido como esclavo, violentado, encarcelado injustamente y olvidado.
Dios me envió delante de vosotros, para preservaros posteridad sobre la tierra, y para daros vida por medio de gran liberación. Así, pues, no me enviasteis acá vosotros, sino Dios, que me ha puesto por padre de Faraón y por señor de toda su casa, y por gobernador en toda la tierra de Egipto. Génesis 45: 7-8 (RVR1960)
No hay duda de que pasó años en lugares donde no quería estar y al igual que él, todos en algún momento nos sentimos fracasados, estancados o frustrados al ver que nos hemos desviado un poco de nuestro sueños por estar en lugares inesperados haciendo cosas que jamás imaginamos.
Te soy sincera, yo me he sentido así, tan lejos de donde quisiera estar, con tantos sueños en mi corazón, luchando con el miedo al no poder llegar a realizarlos; pero a través de la oración e historias como esta es que encuentro fuerzas y esperanza para seguir creyendo que todo tiene un propósito, incluso los desvíos en el camino.
Dios usa cada situación, hasta las más adversas, para moldear nuestro carácter y prepararnos para el propósito que Él ha diseñado para nuestras vidas. Su palabra dice: “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.” Romanos 8:28 (RVR1960)
Si te encuentras desesperado por estar en algún lugar inesperado y sientes estar muy lejos de alcanzar tus sueños, espero que estos 3 puntos te den esperanza y paz en Dios, quien comenzó la buena obra en ti y la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. Filipenses 1:6 (RVR1960)
Los lugares de espera: Son talleres de transformación.
“Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza; y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado”. Romanos 5:3-5 (RVR1960)
José pasó años en la prisión, un lugar de aparente olvido y desesperanza. Pero en realidad, ese tiempo fue crucial para su desarrollo. Allí, José aprendió a administrar, a ser paciente, y a confiar en los tiempos de Dios.
Dios no desperdicia ninguna experiencia. Lo que hoy parece un desvío, en realidad puede ser una parte esencial de nuestro destino.
La fe en medio de la adversidad: Confiar en el propósito de Dios.
“Es, pues, la fe, la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”. Hebreos 11:1 (RVR1960)
Uno de los mayores desafíos en los tiempos difíciles es mantener la fe en que Dios tiene un propósito para nosotros. A menudo, cuando las cosas no salen como esperamos, somos tentados a dudar del plan de Dios. El ¿Porqué? resuena más a menudo en nuestra mente que el ¿Para qué? Sin embargo la vida de José es un testimonio poderoso de que Dios tiene el control, incluso cuando no podemos verlo.
José no sabía cuándo o cómo se cumplirían sus sueños, pero sabía que Dios era fiel. Mantener nuestra fe en medio de la adversidad significa confiar en que Dios está obrando, incluso en lo que parece un silencio prolongado.
Cada desafío es una oportunidad para fortalecer nuestra confianza en Cristo Jesús y para recordar que el sufrimiento no está diseñado para atrasarnos, sino para impulsarnos.
“Para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo”. 1 Pedro 1:7 (RVR1960)
El resultado de la espera: La experiencia bendice a otros.
“La esperanza que se demora es tormento del corazón; pero árbol de vida es el deseo cumplido”. Proverbios 13:12 (RVR1960)
Finalmente, debemos recordar que nuestros tiempos de espera y prueba no son solo para nuestro beneficio, sino también para el de otros. Dios colocó a José en un lugar de poder y autoridad no solo para bendecir y salvar a su familia, sino para ayudar a toda una nación de la hambruna y escasez.
Tú estarás sobre mi casa, y por tu palabra se gobernará todo mi pueblo; solamente en el trono seré yo mayor que tú. Dijo además Faraón a José: He aquí yo te he puesto sobre toda la tierra de Egipto. Entonces Faraón quitó su anillo de su mano, y lo puso en la mano de José, y lo hizo vestir de ropas de lino finísimo, y puso un collar de oro en su cuello; y lo hizo subir en su segundo carro, y pregonaron delante de él: ¡Doblad la rodilla! y lo puso sobre toda la tierra de Egipto”. Génesis 41: 40-43 (RVR1960)
Como José somos llamados a mantener una actitud de fe, humildad y perseverancia, confiando en que nuestro Padre Celestial está obrando en nosotros y a través de nosotros, para su gloria y para bendecir a otros.
Tu experiencia en la prueba te ayudará a guiar a otras personas a realizar sus sueños; tal vez no entendamos el propósito detrás de nuestras circunstancias ahora, pero si permanecemos fieles a Dios, aún en los desvíos y los lugares inesperados, Él cumplirá su plan perfecto en nuestras vidas.
Excelente reflexión Victoria Sarai, así como tú platicas me he sentido muchas veces, y es un momento muy difícil porque nada te puede llenar, solo piensas en las cosas que no pudiste hacer, pero gracias a Dios por la oración que nos ayuda acercarnos más a Dios y el nos muestra cuál es su propósito en nuestras vidas.
Que bella reflexión y tan cierta, Dios te siga bendiciendo